HISTORIA DE UN GATITO AUDÁZ...

Hace unas dos semanas atrás a eso de las cinco de la mañana, escuchamos maullar desesperado a un gatito pequeño. Estaba trepado en un árbol de eucalipto que hay en la calle, desde el jardín de la casa se veía así, mas o menos a la mitad del árbol, se puede calcular la altura  con el poste de la luz.

Salimos y tratamos de hacer que baje, llamándole y ofreciéndole comida, pero no había manera, así estuvo todo el día, maullando asustado pues el viento batía con fuerza el árbol, por supuesto nosotros no dejábamos de intentar bajarlo, pusimos una escalera, pero fue peor porque el gatito trepó aún mas alto, mi hija puso pollo, agua y una mantita, dentro de un balde grande y lo subimos con un gran palo de bambú con la esperanza de que el minino saltara dentro y así poder bajarlo, pero lo que conseguimos fue que trepara mas todavía. Como era ya casi de noche, le dejamos el balde, tal vez podría pasar la noche allí. Lo veíamos muy cansado, ya estaba ronco de tanto maullar y muchas veces solo se sujetaba precariamente con dos patitas y las otras dos ya las tenía en el aire.

Tambien se involucraron los vecinos, pues teníamos miedo a que el gatito cansado dejara de luchar y se dejara caer, los gatos saben caer, pero el era muy pequeñito y la altura era demasiada, en su afán por escapar del árbol ya había trepado hasta la misma punta.

Nos retiramos con la esperanza de que se metiera en e balde, ya era totalmente de noche, al rato la vecina nos avisó que el gatito había vuelto a bajar a una altura en la que tal vez se lo podía atrapar desde la escalera, mi esposo subió ¡y el gatito también!, entonces mi esposo se jugó el todo por el todo y dejando la escalera se trepó hasta casi la punta, pero no logró atrapar al minino, solo nos mató del susto pues el árbol es delgado, tiene las ramas frágiles, en un punto se empezó a doblar bajo su peso y para colmo se batía muy fuerte con el viento, tuvo que bajar derrotado y triste.
Como a las dos horas, la vecina nos dijo que el gatito estaba bajando solo, demoró bastante porque estaba realmente aterrorizado, ¡pero finalmente lo logró! y se escondió entre las plantas del jardincito exterior, logramos hacer que entrara en la casa y que tomara agua y algo de galletas para gato, pero seguía temblando de miedo y agotamiento. Menos mal nuestros gatos lo acogieron bien y finalmente se durmió en la camita que le preparó mi hija.

Al siguiente día pudimos ver que estaba flaquito y desnutrido y seguía muy temeroso.

Con nuestros cuidados rápidamente ganó en  peso y en confianza, ahora es un minino sumamente cariñoso y de buen genio. 

Ahora que ya saben la historia del valiente gatito, les quiero pedir a los amigos que viven en Lima, que por favor le den la oportunidad de tener el hogar que merece, con personas que le den amor y alimento. 
Nosotros no podemos quedarnos con el a pesar de que ya se ganó sobradamente nuestro cariño, porque ya tenemos ocho gatos y además una de las dos gatas, es muy celosa y de mal carácter y le pega, lo que menos queremos es que siga sufriendo mas, ahora merece un hogar tranquilo y con mucho cariño.   

Ayer le dimos su primer baño y le gustó, ahora es un gatito limpio,suavecito y cariñoso.
Espero que entre las personas que lean esto, esté la que le de felicidad.

Si te interesa el señor gatito (es macho), dímelo en un comentario o escríbeme a 
luna9@outlook.com.pe
¡Gracias y Abrazotes!